La Comisión Galega de Control contra a Violencia tomará una decisión el próximo mes de marzo sobre el expediente sancionador abierto al presunto responsable de la agresión mortal a un espectador durante un partido de balonmano femenino. La sanción podría suponer una multa de entre 60.000 y 650.000 euros y la prohibición de acceso a instalaciones deportivas durante cinco años.
Así lo ha señalado el conselleiro de Presidencia, Xustiza e Deportes, Diego Calvo, quien ha trasladado el «afecto y apoyo a la familia de Andrés Rico», fallecido dos meses después de ser agredido el 15 de diciembre de 2024 en Sanxenxo. La víctima, abuelo del árbitro, cayó tras ser empujado por el padre de una jugadora cadete.
«Usaremos todos los medios disponibles para erradicar esta lacra del deporte y de cualquier otro«, afirmó Calvo en la rueda de prensa posterior al Consello de la Xunta, donde también condenó «enérgicamente» lo ocurrido. El conselleiro recordó que la Comisión Galega de Control contra a Violencia se reunió de forma urgente tras los hechos y que se trabaja en una propuesta de resolución que se dará a conocer en marzo.
Por su parte, el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, expresó en redes sociales que «hoy es un día triste para Galicia». «Mis condolencias a la familia de Andrés, fallecido tras una agresión en un partido de balonmano. Los valores del deporte, como el esfuerzo y el trabajo en equipo, deben prevalecer siempre. La violencia nunca es una opción», afirmó.
