Agentes de la Policía Nacional y del Servicio de Vigilancia Aduanera han incautado 150 kilos de cocaína que estaban adheridos a la parte sumergida del casco de un buque portacontenedores atracado en el puerto de Vigo. La operación contó con el apoyo de la agencia antidroga estadounidense DEA, que alertó de la posible entrada de droga en España a través de una organización criminal internacional.
La intervención fue posible gracias a un operativo conjunto activado tras recibir, a principios de abril, una información de inteligencia facilitada por la DEA. La alerta apuntaba a que una red de narcotráfico planeaba introducir una importante cantidad de cocaína en el país utilizando un mercante que haría escala en Vigo.
Durante la investigación, los agentes centraron la atención en un buque específico y barajaron que el cargamento podría estar oculto mediante el método de “adosamiento”, es decir, fijado a la estructura exterior del casco por debajo de la línea de flotación. Con esta hipótesis, se organizó un dispositivo especial de inspección submarina en cuanto el barco llegó a puerto.
En la operación participaron buceadores del Grupo Especial de Operaciones junto con agentes de la Unidad Operativa y de la Base Marítima de Vigilancia Aduanera en Vigo. Durante el registro, localizaron cinco bolsas escondidas en un compartimento sumergido del casco del mercante. En su interior, encontraron un total de 150 kilos de cocaína.
La investigación continúa abierta y se centra ahora en identificar y localizar a los integrantes de la organización criminal responsable del envío.