El conflicto en la Corporación de Radio Televisión de Galicia (CRTVG) ha sumado una nueva jornada de huelga este martes, con afectación a varios programas de los medios públicos. Y además de los programas afectados y de menos afluencia en las redacciones, los trabajadores que secundan los paros han llevado sus protestas al Senado, en Madrid.
Y es que la Cámara Alta ha albergado un nuevo cara a cara entre el presidente del Gobierno, el socialista Pedro Sánchez, y el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo. Presidente de Galicia durante 13 años, los trabajadores de la CRTVG movilizados atribuyen a su etapa un deterioro que ahora continúa, denuncian, con “manipulación informativa”, “abusos” y “represalias”.
En ello ha incidido el presidente del Comité Intercentros, Tiago Alvite, quien ha trasladado a Europa Press, además, que esta ha sido una nueva jornada de “redacciones vacías” y con un seguimiento de la huelga muy significativo. “La programación no esencial ha caído”, ha constatado.
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Los trabajadores en desacuerdo con la gestión de la actual dirección de la CRTVG tienen en cartera otros dos paros previstos para los días 12 y 28 de mayo, jornada esta última en la que se celebran las elecciones municipales.
Entre tanto, en esta jornada, han recibido numerosos apoyos políticos. De hecho, incluso el presidente Sánchez ha aprovechado su debate con Feijóo para saludar a los trabajadores que se trasladaron a Madrid para “denunciar la manipulación y sectarismo a la que están siendo sometidos”.
Dirigentes del BNG, asimismo, han participado en la protesta de Madrid y han manifestado su apoyo por distintas vías a los trabajadores con su líder, Ana Pontón, al frente.
“Solidaridad absoluta” de Díaz
Por su parte, la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, ha mostrado su “solidaridad absoluta” con los trabajadores de la CRTVG, que han protagonizado una protesta a las puertas del Senado, y ha acusado al PP de hacer un uso “partidista” de un ente “vital” para la comunidad autónoma.
Díaz, momentos antes de asistir al Pleno de la Cámara Alta, se ha acercado a la concentración de un grupo de trabajadores del ente para mostrarles su apoyo. La también titular de Trabajo ha señalado que los empleados de los medios públicos gallegos llevan más de cinco años en defensa de un principio fundamental como es la libertad de expresión y la ley de medios públicos de Galicia, que a su juicio se está incumpliendo.
En este sentido, ha reseñado que este ente audiovisual es de “enorme importancia” para la región y ha lanzado al PP que todos los ciudadanos tienen un derecho a una información “veraz”, “sin censuras” y sin “usos partidistas” de los medios de comunicación públicos.
“Estamos hablando de un mandato constitucional”, ha ahondado Díaz para exigir al presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, que respete el “ejercicio democrático” que supone la actividad de un ente sufragado por todos los gallegos.
La Corporación sitúa el seguimiento en el 27,7%
Por su parte, fuentes de la Corporación han situado el seguimiento de la huelga, una vez ya computados los turnos de mañana y tarde, en el 27,7%, lo que supone —recalcan— que “más del 70% del personal no secundó la huelga”.
En la TVG se fieron afectados varios programas como A Revista, Atmosféricos y O Tempo, así como la sección de deportes del Bos Días; en la G2, ZigZag; y en la Radio Galega Ao Contraataque, Pensando en ti, Diario Cultural y Zona Mixta.
La corporación señala que esta convocatoria “no es unánime”, sino que son tres las centrales sindicales, de las cinco que confirman la parte social, las que convocan los nuevos paros.
Asimismo, subraya que las tres centrales convocantes —CIG, CUT y CC.OO.—, que aseguran “reivindicar los derechos de los trabajadores”, son “las mismas tres centrales que se niegan a firmar la oferta de consolidación de empleo del 100% del cuadro de personal, aprobada por el 95% de la asamblea de trabajadores”. “Este proceso se encuentra en suspenso contra la voluntad del personal afectado, 270 personas”, añade.
Finalmente, además de recalcar que seguirá “garantizando el servicio público”, concluye que las fechas y escenarios escogidos para los paros “confirman el carácter político de las convocatorias” ante los comicios del 28M y las elecciones sindicales de junio.