La Organización Juvenil Española (OJE) celebró este verano uno de sus campamentos juveniles en las Illas de Ons, en el municipio pontevedrés de Bueu. Esta organización juvenil, nacida en pleno franquismo para defender «los ideales que inspiran los Principios del Movimiento Nacional», tuvo como invitada de excepción en la jornada de clausura a la directora xeral de Xuventude de la Xunta de Galicia, Cristina Pichel.
La alto cargo de la Consellería de Política Social destacó la «labor educativa» de la OJE, que «promueve el cuidado del medio ambiente» en pleno Parque Nacional das Illas Atlánticas, a la vez que incidió en la importancia de estos campamentos como «un mecanismo para transmitir valores y buenas conductas entre la juventud».
Sin embargo, la OJE, que llevó a 41 niños y niñas de entre 6 y 16 años al archipiélago, no es una organización cualquiera: nació en 1960, coincidiendo con una fase de «apertura» del franquismo, buscando marcar una cierta distancia con el Frente de Juventud de la Falange, de carácter más partidista, aunque supeditando igualmente sus actuaciones a defender «los ideales del Movimiento Nacional», como rezaban sus principios.
En la Transición actualizó este planteamiento, pasando a apostar por «el respeto a la Constitución y a las Instituciones del Estado». En todo caso, todavía mantiene elementos que atestiguan su pasado falangista: los jóvenes que toman parte en la organización se denominan «flechas» o «arqueros» y en sus estatutos todavía apuesta por «servir a la patria y procurar la unidad entre sus tierras y entre sus hombres», siempre desde el «respeto a los superiores».
