Miles de personas y centenares de embarcaciones se han congregado este viernes en el municipio coruñés de A Pobra do Caramiñal para mostrar su rotundo rechazo al proyecto industrial de la pastera lusa Altri en Palas de Rei y a la Mina de Touro-O Pino. La movilización, convocada por la Plataforma en Defensa da Ría de Arousa (Pdra) bajo el lema «Nin mina nin Altri, defendemos o noso modo de vida», ha sido calificada como «histórica» por sus organizadores.
La manifestación terrestre comenzó sobre las 12:30 horas desde la estación de autobuses de A Pobra y recorrió la calle Anxo Rei Ballesteros hasta el aparcamiento junto al club náutico. Según los organizadores, alrededor de 50.000 personas participaron en la marcha, que se convirtió en una marea humana bajo la lluvia. Los manifestantes entonaron consignas como «Altri mata, a mina remata» o «Se é tan boa, que a fagan en Lisboa» mientras portaban pancartas con mensajes como «Ecodicio».
Paralelamente, unas 600 embarcaciones, entre barcos bateeiros y lanchas, se hicieron notar en la ensenada de A Pobra, exhibiendo pancartas con lemas como «Por unha terra viva, Altri Non» y «SOS Auga. Porque non hai unha ría de Arousa B».
Dimisión de conselleiros
Durante el acto final, Pilar Naveira, presidenta de la asociación vecinal Ulloa Viva, destacó que, aunque «es probable que el proyecto obtenga licencia administrativa», lo que «es seguro al 100% es que no tiene licencia social». Además, avanzó que, una vez emitida la evaluación ambiental integrada y la aprobación del proyecto industrial, iniciarán acciones legales y administrativas para frenar la macrocelulosa.
Por su parte, Xaquín Rubido, presidente de la Pdra, exigió la dimisión del conselleiro do Mar, Alfonso Villares; de la conselleira de Medio Ambiente e Cambio Climático, Ángeles Vázquez; y de la conselleira de Economía e Industria, María Jesús Lorenzana. «Pensamos que la Xunta tiene que cambiar de rumbo y el presidente de la Xunta es el responsable», afirmó.
«Un insulto a la inteligencia»
El acto final estuvo dirigido por los actores gallegos Isabel Risco, Carlos Blanco y Quico Cadaval. Blanco instó a la Xunta a rectificar: «Rectificar es de sabios, están a tiempo. Busquemos una salida para nuestras rías, que están muy enfermas y no producen».
Los organizadores calificaron la movilización de «histórica» y denunciaron la apuesta de la Xunta por «una mina y una macrocelulosa» mientras «desprecia al sector marisquero y bateeiro». En un momento simbólico, los discursos se interrumpieron para que las embarcaciones presentes hicieran sonar sus sirenas, en un gesto de unidad con la multitud en tierra.
Los manifestantes también alertaron sobre el impacto medioambiental del proyecto y su contradicción con el contexto de cambio climático. «Nos quieren imponer la mina y la celulosa como modelo de industrialización de Galicia, un insulto a la inteligencia cuando el agua es cada vez más valiosa y quieren regalarla a sus amiguetes», criticaron.
Finalmente, aseguraron que la protesta es solo el comienzo y que continuarán presionando en todos los niveles: «No nos van a desmovilizar. Aún queda recorrido para seguir luchando en Galicia, en España y en Europa».