En un tiempo en el que los hogares tienden a ser más pequeños, las familias más reducidas y los desplazamientos más individualizados, también el transporte empieza a ajustarse a esta escala. Con ese planteamiento nace «Neno», un microvehículo eléctrico desarrollado y fabricado íntegramente en Galicia por el grupo Castrosua, dentro de su nueva división Mobme.
Con apenas dos metros cuadrados de superficie, espacio para dos personas y más de 180 litros de capacidad de carga, «Neno» se sitúa como el vehículo eléctrico más compacto del mercado. Puede conducirse con carné AM desde los 15 años, lo que lo convierte en una opción accesible y versátil para trayectos urbanos cortos, tanto individuales como compartidos.
«Donde cabe un coche, aparcan cuatro Nenos»
Además de la versión de pasajeros, Castrosua ha creado una variante cargo pensada para el reparto de mercancías ligeras en áreas céntricas o de difícil acceso. Ambas versiones buscan facilitar una movilidad menos invasiva, que reduzca la congestión y el uso excesivo del espacio público. Como indican desde la empresa, «donde cabe un coche, aparcan cuatro Nenos».
Con este proyecto, la histórica carrocera compostelana se adentra en el terreno de la micromovilidad con el objetivo de ofrecer soluciones adaptadas a las dinámicas actuales de las ciudades. Desde la compañía señalan que «Neno» responde a la necesidad de «una movilidad compartida, microcapilaridad a demanda, primando lo funcional, cercana para todos los perfiles de usuario, y rentable».
Mobme, la nueva marca desde la que se impulsa el desarrollo de este tipo de vehículos, aspira a diseñar soluciones a medida según el entorno, explorando nuevas formas de desplazarse que complementen al transporte colectivo sin aumentar la presión sobre el espacio urbano. En palabras del grupo, «esta iniciativa responde a la creciente necesidad de soluciones ágiles, sostenibles y eficientes para los desplazamientos urbanos».