La plataforma SOS Sanidade Pública, que integran diversas organizaciones y sindicatos de la comunidad, alerta de que la sanidad pública gallega vive una situación “dramática” ante la que seguirán las protestas locales, pero también recogerá firmas para que los gallegos puedan condenar “el maltrato” del PP “al bien más preciado, que es la salud”.
Salvo que “cambien las cosas”, además, planean unificar fuerzas y convocar “una gran manifestación” de carácter autonómico a la vuelta del verano, “en otoño o invierno”.
En una rueda de prensa en Santiago, el portavoz de la plataforma, Manuel Martín, ha aludido, entre otras cuestiones, a problemas de cierres de centros o de falta de personal que sufren localidades como Castro de Rei, Boiro, Rianxo, Ribeira, Outes, Tui, Sanxenxo, Vigo, Folgoso do Courel, o Fornelos de Montes. En varios municipios ya se han registrado protestas, que continuarán en verano.
Asimismo, SOS Sanidade Pública ha constatado problemas en la atención sanitaria, sobre todo vinculados con la falta de pediatras, en localidades como A Limia, Verín, O Carballiño, O Barco de Valdeorras, Pontevedra, A Mariña, o Vilalba, donde “centenares de niños carecen de servicio de pediatría” y son atendidos por médicos de familia o derivados al hospital de Lugo.
Asimismo, zonas como A Illa, Vilagarcía, Cuntis, Ribadeo, Fene, Vilalba, Cee, Catoira, Ribadeo, Carballo o Fisterra han registrado protestas vinculadas con la “falta de pediatras”. Martín ha incidido en que “201 ayuntamientos de la comunidad no cuentan con servicio de Pediatría” y ha esgrimido que “se cierran más camas hospitalarias que nunca” en Galicia –citando el dato de 810–.
“La zona que más vota al PP”, el rural, “castigada”
La “peor” parte de una situación que es, en palabras del portavoz de SOS Sanidade Pública, “catastrófica”, se la lleva, pese a ser “la que más vota al PP”, la zona del rural, donde la población está más dispersa y envejecida. “No se puede castigar a la gente que necesita más atención”, ha aseverado, y ha hecho un llamamiento a la sociedad gallega para que denuncie “el maltrato” del PP “al bien más preciado, que es la salud”.
En este escenario, a la espera de concretar nuevos actos de protesta, la plataforma aprovechará el verano para “informar” y recoger firmas que permitan “expresar el malestar ciudadano”. Martín ha recordado, además, la entrega en el Parlamento de más de 50.000 firmas para avalar una iniciativa legislativa popular en defensa de la sanidad pública y de la Atención Primaria.
“Hacer más con menos”
Aunque en el transcurso de la rueda se ha recordado que otras organizaciones como BNG y UGT también están integradas en el colectivo, han participado en el acto representantes de la Asociación Galega para a Defensa da Sanidade Pública, CC.OO. y CIG, así como de la propia plataforma en el área de Ferrol, que ha incidido en las esperas en radiología y fisioterapia en esta área.
Así, Manuel González, de CIG Saúde, ha advertido que la sanidad gallega sufre “las consecuencias de aplicar la máxima de ‘hacer más con menos'” y, frente a “parches” como las medidas del plan diseñado por el Sergas para este verano, ha remarcado que las dificultades en el primer nivel asistencial tienen un carácter “estructural”. “No es solo un problema de verano, aunque se agudiza y maximiza”, ha avisado.
A su vez, la socialista Elena Espinosa también ha puesto el foco en la Atención Primaria, como “puerta de entrada” en la sanidad. Su bloqueo, ha enfatizado, contribuye al colapso de urgencias. En su intervención, ha acusado al PP de “desmantelar” la sanidad y ha sugerido que su “intención” podría ser caminar hacia “eliminar la especialidad de Pediatría”.
“Basta ya de que nos digan que la culpa es del Gobierno de España, las competencias y la responsabilidad las tiene la Xunta”, ha aseverado la portavoz socialista del área.
“Entregar” pacientes a la privada
Y si desde la Asociación Galega para a Defensa da Sanidade Pública se ha cargado contra el “eufemismo de la reorganización asistencial” para justificar el cierre de centros de salud, Carlos Pardo (CC.OO.) ha señalado su propia situación como ejemplo del “desmantelamiento” de la sanidad pública.
Según ha relatado, espera desde hace meses una operación de la vesícula porque ha decidido que le operen en el sistema público, aunque le ofrecieron hacerlo en una clínica privada “a los 15 días”. “Yo soy la prueba de que hay una intención política clara por parte del PP de desmantelar un servicio público para entregárselo a sus amigos ricos”, ha zanjado.