El Gobierno de Antas de Ulla ha detectado impagos del suministro de energía eléctrica desde el año 2016 por parte del anterior Ejecutivo local. Fue durante la elaboración del presupuesto para 2024, que se someterá a aprobación inicial el próximo jueves, cuando se reveló la existencia de un déficit de 341.072,63 euros por la falta de pago del suministro de energía eléctrica, dejado por el anterior alcalde, Javier Varela.
A pesar de que las facturas sin pagar se acumulaban desde al menos 2016 y una sentencia firme del 18 de febrero de 2021 obligaba al Concello de Antas de Ulla a pagar 135.665,58 euros más intereses, dos años después de esa decisión judicial, la Administración local aún debía 92.703,44 euros más los intereses de demora.
La deuda total a día de hoy, los mencionados 341.072,63 euros, está parcialmente judicializada con sentencia y con un acuerdo de pagos para liquidarla junto con la facturación corriente en pagos mensuales, pero no se cumplió ni con la compañía Gas&Power, por un importe de 247.550,89 euros en el período de enero de 2015 a julio de 2020, ni con Naturgy Iberia, por 28.128,88 euros entre junio de 2017 y octubre de 2020.
Debido a la gravedad de la situación, desde el ayuntamiento, el Gobierno de Pilar García Porto ya mantuvo un encuentro con los acreedores con el fin de fraccionar la deuda y establecer un acuerdo para unos plazos de pago realistas, que la Administración local pueda asumir junto con la facturación corriente. El doble objetivo de estas conversaciones es tanto garantizar el suministro como regularizar una situación que está generando graves perjuicios a las arcas municipales.