Un vertido en la parroquia de Santa Mariña en Outeiro de Rei, que desprende un fuerte olor, ha provocado que la Confederación Hidrográfica del Miño haya colocado una barrera de contención.
Esa mancha de aceite, sobre el río Miño, se extiende en 400 metros de ese cauce fluvial, y fue denunciada por un particular que avisó este lunes al 112.
El alcalde, José Pardo Lombao, se ha quejado porque «es la primera noticia» que tenía de dicha mancha, advertido por la prensa, en la zona de Santa Mariña. Ni siquiera se ha informado al «personal del Ayuntamiento», ha reprobado.
Con todo, y ante la posibilidad de que dicho vertido viniese de la industria láctea Tegestacín, que se está desmantelando, el alcalde de Outeiro de Rei ha recordado que dicha empresa «está sin actividad desde hace meses» más allá del «montaje o desmontaje» de las instalaciones que acomete la empresa. «No sabemos qué trabajos están haciendo allí», ha reseñado.
El Ayuntamiento de Lugo ha decidido también instalar una barrera de contención para frenar el vertido detectado, una medida «puramente de carácter preventivo» con la que se pretende «atajar» la posibilidad de que la mancha siga extendiéndose y afecte a la traída pública de la capital, según ha explicado el responsable y teniente de alcaldesa, Miguel Fernández.