La Audiencia Provincial de Lugo ha condenado a tres años de cárcel a una acusada por estafar 22.000 euros a una mujer a la que le hizo creer que iba a ayudarla con los trámites de su divorcio, por lo que firmó unos supuestos documentos que favorecían a la sospechosa. De esta forma, según la sentencia, la condenada consiguió engañar a la víctima para que la acompañase a diversas sucursales bancarias y, en ellas, sin que fuese consciente de lo que realmente estaba haciendo, retirase diversas cantidades en efectivo con las que se quedó la procesada.
Además, el tribunal relata en el apartado de hechos probados de la resolución que la acusada también intentó estafarle 6.000 euros a una tercera persona, al hacerle creer que tenía licencia para comercializar en Lugo productos agrícolas y que podía cedérsela para que vendiese su cosecha de remolacha. En esta ocasión, sin embargo, no consiguió su propósito.