La CIG ha convocado al sector del comercio de alimentación de la provincia de Lugo a una jornada de huelga para el próximo viernes 23 de junio con el objetivo de reclamar “un convenio digno”. Según ha indicado el sindicato, la decisión se ha dado en respuesta a las “insuficientes propuestas trasladadas por las patronales” que suponen “condenar a los trabajadores a tener el peor convenio del sector en el país”.
Así, ha explicado que, aunque la patronal -Gadis y Froiz- ha alegado que los incrementos salariales que ofrece son mayores que los de otras provincias, los consideran insuficientes. “Continúan siendo insuficientes porque partimos de una situación muy inferior. Con la propuesta empresarial, las tablas de todas las categorías profesionales por debajo del grupo tres continuarían en el límite del Sueldo Mínimo Interprofesional”, ha advertido el secretario comarcal de la CIG-Servizos, Xoán Díaz.
En esta línea, ha recordado que en la última reunión de la mesa, la patronal propuso un incremento del 5% para el año 2022, con una paga única en concepto de atrasos de 780 euros -“231 euros menos de los que correspondería””-, una subida del 4% para 2023, del 3,5% para 2024 y del 3,25% para el 2025. Así, ha indicado que la patronal “se niega a incluir” una cláusula de revisión que opere año a año con referencia en el IPC real y que “lo único que proponen” es una revisión a final del convenio, pero “sin efecto retroactivo y sin dar lugar al cobro de atrasos”. “Para nosotros esta oferta resulta insuficiente porque no permite recuperar ni garantizar el mantenimiento del poder adquisitivo de los salarios, en un sector además que desde el inicio de la pandemia y en el actual contexto de precios disparados obtiene beneficios históricos”, ha remarcado Díaz.
En esta línea, Díaz ha criticado que en esta negociación la patronal “no es ni justa ni generosa” con los trabajadores, que fueron los que, con su esfuerzo, “permitieron que las compañías de distribución lograsen esas millonarias ganancias”.
Ante esto, ha avanzado que “van a luchar por un convenio digno”. Continúan con la reclamación de incrementos salariales del 6,5% para 2022 y del 5,7% para 2023 para “poder revertir el empobrecimiento de los últimos dos años”; así como una cláusula de revisión salarial al IPC real y con carácter retroactivo para “garantizar que no haya pérdida del poder adquisitivo en el futuro. Además, demandan el cobro del complemento de Incapacidad Temporal hasta el 100% de la base de cotización.
“Muchas de estas mejoras fueron asumidas por la patronal y se aplican en el convenio sectorial de A Coruña, por lo que las trabajadoras de la provincia de Lugo no van a pasar por menos”, ha recalcado Díaz. Además, ha aclarado que la CIG ha invitado al resto de las organizaciones sindicales con presencia en la mesa a que se sumen y los acompañen en esta convocatoria, que fue un mandato salido de las asambleas de personal.