La alcaldesa de Lugo, Lara Méndez, ha anunciado este martes que el Concello ha aprobado su participación en el programa de ayuda a las actuaciones de rehabilitación a nivel de barrio del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia financiado por la Unión Europea-Next Generatión EU para la que sería la fase XVII del Casco Histórico.
En esta convocatoria —que se gestionará, como hasta ahora, desde la Empresa Municipal de Vivenda e Solo— el Ejecutivo local aspira a recibir financiación para regenerar un total de 80 viviendas a razón de 35 en 2023, 26 en 2024 y 19 en 2025.
La colaboración supondrá un desembolso total de 2.588.502 euros, correspondiéndole 1.521.222 euros al Ministerio, 225.072 al Concello y 842.207 a los promotores privados.
Este ámbito, en el que se concentran un total de 848 edificios de los que sólo 83 no tienen uso residencial —menos de un 10%—, fue declarado la semana pasada Entorno Residencial de Rehabilitación Programada (ERRP).
Un cambio de denominación (anteriormente ARI) que resultaba de obligado cumplimiento para concurrir a dichas ayudas y para el que los técnicos de la Empresa Municipal de Vivenda e Solo tomaron como base la documentación ya existente, al coincidir con la zona delimitada por el PEPRI.
Desde su origen, estas ayudas han contribuido a impulsar la reforma de 636 viviendas —354 en las seis primeras fases y 282 más hasta la XIV edición—, otras quince se encuentran aún en tramitación y EVISLUSA espera poder gestionar otras 30 adicionales dentro de la fase XVI.
“Queremos avanzar en la humanización y dinamización de todos los barrios de la capital; en el caso del Casco Histórica, esta actuación obedece a una recuperación urbanística pero también comercial, a través de los viveros municipales que impulsamos en la Tinería y con la que, asimismo, estamos corrigiendo la degradación social que le afectaba”, ha destacado la alcaldesa.
La regidora también ha incidido en el “esfuerzo” que hace el Concello “a pesar de no tener competencias” en materia de vivienda, lamentando también “la falta de interés e iniciativa de la Xunta de Galicia”.