El Concello de Vilalba respalda y apoya las demandas y quejas de los vecinos por la situación del centro de salud, con bajas de médicos de familia sin cubrir y retrasos prolongados en determinadas pruebas y consultas.
“Hablamos de un servicio público esencial y cualquier persona usuaria del centro de salud de Vilalba es testigo de los recortes y los retrasos”, asegura la alcaldesa, Marta Rouco, que respalda el trabajo de los profesionales del centro y le pide a la Consellería de Sanidade de la Xunta “que cubra las plazas vacantes por bajas o jubilaciones y busque soluciones urgentes para las listas de espera”.
A día de hoy, uno de los médicos de atención primaria de la jornada de tarde está de baja y sin sustituto; otro profesional está de vacaciones y se jubila en febrero, y una tercera baja fue cubierta, pero la persona sustituta tiene aprobada la adaptación de su jornada laboral por conciliación y consulta solo los lunes, miércoles y viernes, y dos de estos días con reducción de horario.
Desde el Concello de Vilalba señalan que “por estas bajas sin cubrir, se tarda más en conseguir una cita de atención primaria o hay quienes directamente acuden a urgencias, colapsando también este servicio”. Además, varios padres y madres de Vilalba ya presentaron reclamaciones al encontrarse algunos días sin pediatra en el centro de salud.
Los problemas son mayores en especialidades como ginecología y en las pruebas diagnósticas, con meses de espera para una ecografía, por ejemplo, o semanas para obtener los resultados de una analítica. “Esta situación provoca que muchos de nuestros vecinos acudan a una consulta privada o tengan que desplazarse hasta Lugo, algo que no podemos permitir”, añade Rouco.
Mientras el centro de salud tiene estos problemas, el Sergas hizo pública la semana pasada la adjudicación de 65 nuevas plazas de médicos de atención primaria, ninguna de ellas para el centro de salud de Vilalba.