Las tres hermanas Pombo triunfan en redes sociales. Sus recomendaciones, tanto de alojamientos como de ropa, pronto cuelgan la etiqueta de agotado y cientos de miles de personas siguen sus cuentas. La más joven de las hermanas, María Pombo, pasó el puente de diciembre en Ribadeo, con su marido Pablo Castellanos y su hijo Martín.
En esta ocasión ha sido Marta Pombo quien se ha acercado a tierras gallegas. La joven ha ha elegido una paradisíaca playa de Céltigos, en Ortigueira, para celebrar su 31 cumpleaños —fue el pasado sábado— en compañía de su pareja, Luis Zamalloa, su hija Matilda, de tan solo tres meses, y su perro Gaia.
La pareja encontró refugio en un chalé alquilado a pie de mar en la playa de Mazorgán, en la parroquia de Céltigos, con todas las comodidades y unas vistas privilegiadas. La joven difundió desde su cuenta de Instagram un mensaje de agradecimiento “por todo lo bueno que tengo, todo lo bueno que me rodea y todo lo bueno que me acompaña! Lo tengo todo, con días mejores y días peores, pero en definitiva, todo lo que siempre he querido tener en mi vida! Y aunque la vida es un constante sube y baja, trato de vivir cada momento, bueno o malo, con agradecimiento porque al fin y al cabo es un día más y hoy, un año más”, añadió.
Marta Pombo aprovechó su estancia en el Ortegal para visitar los cercanos acantilados de O Picón, en la vecina parroquia de Loiba, donde se encuentra el conocido como banco más bonito del mundo, hacer una barbacoa en el chalé o trasladarse hasta O Vicedo.
“Empiezo los 31 con el mejor regalo de la vida, mi Matiti, junto a mi @zamaluis y mi zorrito [en alusión a su perro]”, declaró feliz desde su escondite gallego. Su pareja y prometido también aprovechó la ocasión para felicitar a “la mujer de mi vida”, como se refirió a ella. Destacó de Marta que “nunca” ha conocido a alguien con su “bondad” y su “felicidad”. “Eso se desprende y se contagia! Soy un afortunado por tenerte a mi lado. Te quiero mucho Pompis!”.