La CIG acusa a la Xunta de Galicia de intentar “reventar la huelga del personal de Maitours (grupo Alsa)” imponiendo un incremento del 300% en los servicios mínimos, coincidiendo con el inicio del curso escolar. A pesar de llevar casi dos meses en paro, desde el sindicato denuncian que la empresa se niega a negociar y aplicar el convenio provincial, y que la Xunta y del Concello de Ferrol se muestran desinteresados.
Con esta orden, explica Xesús Pastoriza, responsable de Transportes de la FGAMT-CIG, la Xunta de Galicia impone el funcionamiento del 80% de los servicios diarios, lo que impide que la mayor parte de los trabajadores no puedan ejercer su derecho fundamental a la huelga.
Por ello, la CIG adelanta que van a recurrir esta medida en los tribunales y que la plantilla “no va a abandonar su lucha”, y que lucharán “hasta conseguir que se respeten sus derechos”. Porque lo que reivindican, recuerda Pastoriza, no es otra cosa que se les aplique el convenio del transporte de viajeros de A Coruña —como se les aplica al resto de compañeros de la UTE—, o que la empresa compense los festivos trabajados.
Desde el sindicato no entienden por qué Alsa se empeña en “dilatar” un conflicto en el que ya hay un dictamen judicial que les obliga a “aplicar el convenio provincial, según establece la normativa laboral”. Además, critican que la Xunta no esté interviniendo y una “falta de interés” por parte del Concello de Ferrol, a pesar de que les “afecta de lleno”.