El Gobierno gallego ha solicitado la elaboración de un plan de contingencia a los titulares y responsables de la EDAR de A Silvouta.
Lo hace después de que las obras de puesta en marcha de esta nueva estación depuradora de aguas residuales provocara varios vertidos al río Sar, afectando a los municipios de Ames, Brión y Rois. Concellos en los que se habían dado avisos tras la aparición de agua turbia, de color marrón y con olor a fecales.
Esta petición se realizó durante una reunión de la comisión de seguimiento de la depuradora en la que participó Augas de Galicia -organismo hidráulico de la Xunta-, el Concello de Santiago y Acuaes, promotora de la depuradora.
Desde la promotora aseguran que contactarán con los regidores de Ames y Padrón, pues ambos Concellos se han visto afectados por el vertido.
Durante la reunión, el responsable de Augas de Galicia advirtió que no se están cumpliendo los protocolos de trabajo establecidos, lo que compromete el correcto funcionamiento del sistema de depuración: «muchas de las aguas que llegan desde la EDAR se vierten sin tratar o después de pasar solo por un pretratamiento».
A pesar de que los primeros avisos por vertidos en el río se registraron hace una semana, el responsable de Augas de Galicia recuerda que no fue hasta este domingo cuando se activó un proceso físico-químico completo.
En esa línea, desde Acuaes han asegurado que «en todos los arranques de las depuradoras resulta complicado cumplir parámetros desde el instante inicial, una situación que en el caso de esta depuradora se ha dificultado por una punta de carga imprevista derivada de los sedimentos acumulados durante años en los colectores existentes».