El buque Awadi comenzaba a arder este lunes por la tarde en el puerto de Ribeira. Durante estos días se desplazaba hasta el lugar un amplio dispositivo de efectivos que realizaron tareas de extinción.
Ahora la misión de estos equipos es mantener el barco a flote, pues podría verter materiales contaminantes al mar. Es por ello que se han desplegado unas barreras contaminantes alrededor del buque mientras los operarios trabajan en el achique de agua y tratan de enderazar el barco.
Por el momento se han evacuado unos 40.000 litros de agua del buque y no se aprecia «contaminación fuera del perímetro» establecido por las barreras.
Desde la Consellería do Mar aseguran que la situación evoluciona de manera «lenta pero favorable» y ya se ha recuperado la actividad en la zona comercial del puerto de Ribeira.