Las ciudades de Lugo y Ourense han puesto a disposición del dispositivo de extinción de incendios forestales en Galicia los efectivos de Bomberos municipales, con el objetivo de que puedan colaborar en las tareas de lucha contra los fuegos que afectan a la montaña de ambas provincias. Los Bomberos de A Coruña también se sumaron el lunes a esta medida, con el envío de 3 vehículos y 12 efectivos.
En concreto, el jefe en funciones de los Bomberos de Lugo, Óscar Freire, acudió con una dotación de bomberos municipal y una nave nodriza con capacidad de 4.000 litros a Palas de Rei, municipio a donde les remitieron desde la dirección del mando operativo autonómico.
Allí realizaron tareas de protección en los pueblos de Cabana y Pambre, permaneciendo toda la noche del lunes al martes, ayudando a estabilizar el incendio. La regidora lucense, Lara Méndez, mantiene abierta la colaboración y los efectivos están a la espera de que les den nuevas indicaciones por parte de las autoridades gallegas de las zonas donde necesitan apoyo.
Por su parte, a las 07:45 horas de este martes salió del parque de Ourense un vehículo nodriza con tres bomberos que colaborarán en los trabajos de extinción. Harán turnos de 12 horas para relevo —esta tarde saldrá otro turno con cuatro efectivos, y así sucesivamente—.
Los bomberos van al puesto de mando avanzado de la Axencia Galega de Emerxencias (AXEGA), donde se pondrán a las órdenes del jefe de extinción.
Socialistas se solidarizan con los afectados
Diputados socialistas de las provincias de Lugo y Ourense se han desplazado este martes a la zona afectada por el fuego, desde donde han lanzado un mensaje de apoyo y ánimo a los efectivos que trabajan contra los incendios, así como de apoyo a las familias afectadas.
Así, la secretaria de Organización Provincial del PSdeG en Lugo, Pilar García Porto, ha expresado la “profunda preocupación” de los socialistas por esta ola de incendios, así como “la solidaridad, el afecto y el apoyo incondicional” a los vecinos afectados.
“La prioridad es salvar vidas y apagar los incendios que asolan la zona sur de la provincia”, ha dicho García Porto, que ha reconocido la “gran labor” de brigadistas y efectivos de extinción y ha confiado en que “acabe lo antes posible esta pesadilla”.
“Una vez terminen los fuegos, será el momento de pedir toda la información sobre cómo actuó la Xunta para que la situación alcanzara tal gravedad y exigir las responsabilidades correspondientes. También queremos que sepan todos los afectados que en estos momentos, pero, sobre todo, al día siguiente de que termine estos incendios, tanto los vecinos como los ayuntamientos seguirán teniendo nuestro apoyo y colaboración”, ha subrayado.
En Ourense, desde la aldea de Alixo, el portavoz provincial socialista, Rafa Villarino, ha asegurado que en este lugar “no funcionó” la coordinación entre los servicios de extinción de la Xunta, lo que motivó que “un incendio prácticamente extinguido” estuviese próximo a generar “una catástrofe”. “Si no es por el trabajo de los vecinos, hoy tendríamos una catástrofe mayor”, ha apuntado.