La alcaldesa de A Coruña, Inés Rey, mantuvo este lunes una reunión con representantes del sector hostelero y turístico de la ciudad para valorar la temporada estival y hacer balance de las fiestas celebradas en los últimos meses. Todos los presentes coincidieron en destacar el papel de unas celebraciones «históricas», tal y como apuntó la regidora tras la reunión.
«Estas fiestas llegaron en un momento decisivo, tras dos años de restricciones que afectaron especialmente a los sectores más beneficiados por las celebraciones, como la hostelería, el taxi, los artistas o los técnicos de sonido e imagen», ha destacado la alcaldesa, quien ha incidido en que generar actividad económica «es también una política social».
En la reunión, celebrada en María Pita, participaron el presidente de Hospeco, Agustín Collazo; el presidente de la Asociación de Hostelería de A Coruña, Héctor Cañete; el gerente de A Coruña Convention Bureau, Álvaro Lens; el representante de la Asociación de Viajes en Galicia en A Coruña, Óscar Regal; la representante de la Asociación de Organizadores de Congresos y responsable de Orzán Congress Paloma Orjales; la directora de Palexco, Juana Avellaneda; la responsable de Expocoruña, Pilar López, e Isabel Fouz y Lucía Vieito, de la Federación de Asociacións Veciñais da Coruña.
La alcaldesa destacó la gran cantidad de eventos que generaron riqueza para la ciudad, comenzando con el regreso del San Juan y la recuperación del estadio de Riazor como recinto de grandes eventos gracias a la celebración del Morriña Fest, mientras que las Festas de María Pita «marcaron un gran punto de inflexión como la gran celebración de toda la ciudad».
«La principal protagonista de este agosto fue la gente de A Coruña, tanto por su demostrada capacidad para acoger a quién nos visita como por su comportamiento cívico: hubo cientos de miles de personas en la calle sin que se produjera ningún incidente de relieve», ha proseguido.
Las fiestas también «marcaron un hito» con la presencia de artistas gallegos, donde destacó el Festival Noroeste Estrella Galicia, con un cartel encabezado por primera vez por una banda en gallego, Tanxugueiras, que reunió a más 80.000 personas en Riazor.
El resto del festival también fue «un éxito indiscutible», con nuevos escenarios y una notable presencia de artistas femeninas. La cultura gallega «tuvo su protagonismo» en la Romería de Santa Margarida, que cerro junto con el concierto de Manu Chao en las Festas de María Pita.
Las fiestas, en cifras
Las Festas de María Pita y sus conciertos reunieron a casi medio millón de personas en conjunto. Según las cifras recopiladas, hubo 238.500 asistentes en las Noites de María Pita, 184.000 en el Festival Noroeste Estrella Galicia, 50.000 en el Morriña Fest y 20.000 en la Semana Clásica.
«Estas fueron unas fiestas de toda la ciudad que se descentralizaron y se extendieron por todos los barrios con eventos como Manicómicos y Cascarillarte, que se celebraron en 19 plazas y espacios de la urbe», ha señalado Inés Rey durante la rueda de prensa.
La alcaldesa ha puesto el acento también sobre la recuperación de las fiestas de los barrios, en cuya organización colaboró el Concello desde el mes de mayo. Desde entonces hubo fiestas en 16 barrios, desde los Rosales al Barrio de las Flores, y hasta octubre habrá nueve más.
Además de la asistencia, la alcaldesa comprobó de la mano de los representantes de los sectores hosteleros y turísticos que las cifras de activación económica alcanzaron también grandes hitos. Por ejemplo, en los conciertos de las Festas de María Pita y del Noroeste participaron más de 40 promotores de diferentes empresas de Galicia, el 57% con sede en la ciudad. Por otra parte, los hoteles de la ciudad tuvieron una ocupación media del 90% durante todo el verano, incrementándose su facturación en un 15% con respecto al año 2019, previo a la pandemia.
