Un hombre ha sido condenado a once años de cárcel por un delito continuado de agresión sexual sobre una menor de dieciséis años, hija de la que era su pareja y con la que convivía “ejerciendo un rol similar al paterno”, tal y como consta en la sentencia de la sección primera de la Audiencia Provincial de A Coruña.
Además, el tribunal le ha impuesto la prohibición de aproximarse a menos de 500 metros a la menor, a su domicilio o a cualquier lugar donde se encuentre, así como de comunicarse con ella por cualquier medio o procedimiento durante 18 años y de indemnizar a la víctima con 15.000 euros.
Los magistrados también lo han inhabilitado durante diez años para ejercer la patria potestad, tutelas o cualquier profesión o actividades relacionadas con menores de edad, así como diez años de libertad vigilada.
El procesado se declaró culpable una vez que se le informó sobre los hechos objeto de acusación admitiendo que en “varias ocasiones la menor le manifestó su negativa a mantener relaciones sexuales con él, doblegando la voluntad de la menor y su negativa a mantener relaciones sexuales diciéndole, entre otras expresiones, que si no accedía dejaría a su madre y los echaría de casa”, tal y como indica el tribunal en la sentencia.