La corporación del Concello de Ferrol celebró ayer un pleno extraordinario que tenía como tema central la aprobación del paquete de medidas fiscales que el gobierno local diseño para conseguir aliviar la crisis económica a los pequeños negocios de la ciudad, afectados por las restricciones sanitarias del Covid.
Esta modificaciones de las ordenanzas fiscales propuestas por la Administración local, que recibió las críticas de FeC y BNG, se votaron de forma separada, por puntos. Solamente salió adelante por unanimidad la modificación del canon de terrazas, para eximir a los hosteleros de su pago todo lo que queda de 2020 y los meses del 2021 en los que esté vigente el estado de alarma. A pesar de contar con el apoyo del resto de grupos, tanto los comunes de Jorge Suárez como el BNG de Iván Rivas le reprocharon al gobierno local que no se exima también a los hosteleros del pago de otros servicios como el agua o la recogida de basura, tal y como se hizo en la primera ola.
El resto de modificaciones de las ordenanzas fiscales salieron adelante por mayoría simple. Se incluían una rebaja del IBI del 20% para los propietarios de los locales, bonificaciones en el pago del impuesto de actividades económicas (IAE) hasta un máximo del 95% y la modificación de la propia ordenanza general, para poder agilizar la adopción de medidas de urgencia. Estos tres puntos solo tuvieron el voto favorable del PSOE. El Partido Popular se abstuvo, mientras que FeC y el BNG votaron en contra.
Los portavoces de estos dos grupos tacharon las medidas de «neolibrales» y apuntaron a que solo beneficiarían a las grandes empresas y a los pocos propietarios de locales comerciales. «Me atrevería a decir que no llegan a un 2% los empresarios que son dueños del local que explotan comercialmente», dijo Jorge Suárez. Iván Rivas insistió en que estas medidas «en nada benefician» a las pymes ni a los autónomos de Ferrol y que están pensadas «para beneficiar a grandes corporaciones como Navantia» y demandó más ayudas directas para los afectados.
Otro de los puntos importantes de este pleno extraordinario fue la aprobación del convenio suscrito entre el Ministerio de Fomento, el IGVS y el Concello de Ferrol dentro del Plan Estatal de Vivienda 2018-2021 y que se dotará este año con 332.750 euros. La partida se dedicará a las áreas de rehabilitación integral (ARI) de A Magdalena y Ferrol Vello, mientras que Esteiro, A Graña y Recimil quedan fueran. Contó con los votos a favor del PSOE, del PP y de Ferrol en Común, a pesar de que su portavoz, Jorge Suárez, lamentó que descendiese la partida presupuestada este año. El BNG votó en contra al considerar «injustificado» que algunas zonas quedasen este año sin presupuesto.
También se aprobó el Plan de Acción contra el clima con el voto en contra del BNG y la abstención del PP, mientras que las subvenciones a entidades vecinales y el reglamento del Consello Sectorial da Lingua contaron con el apoyo de todos los grupos de la corporación ferrolana.