El mar de Fisterra, que siempre guarda secretos, ha devuelto otra pieza que forma parte de la historia náutica de Galicia. Este lunes, un equipo de buceadores de la Armada de Ferrol y de la Policía, tras recibir un aviso del centro «Buceo Fisterra», localizó en las profundidades de Punta Sardiñeiro un cañón de bronce de unos 50 centímetros de longitud, junto a otros restos arqueológicos de gran valor. Los objetos se encontraban a unos cuatro metros de profundidad.
Según las primeras investigaciones, estos restos podrían pertenecer al pecio de «Punta Restelos», un galeón del siglo XVI conocido como Santa María la Anunciada, que formaba parte de la flota del almirante Padilla y se hundió en 1596 en estas mismas aguas. La relación con este naufragio histórico hace que el hallazgo tenga un especial valor para la historia marítima gallega.
Gracias a la coordinación entre la Unidad de Buceo de Ferrol y el Grupo Operativo de Actividades Subacuáticas, se realizó una intervención precisa en la que, en solo 30 minutos, se logró catalogar el cañón y preservar el entorno marítimo. Los restos arqueológicos serán trasladados al Museo del Mar de Galicia en Vigo, donde se someterán a un análisis más profundo para esclarecer su origen y relevancia histórica.
